Llegaba la noche al Valle de Punilla y la cuarta noche del Festival del Tango daba comienzo con un homenaje a Elsa Rivas, la recordada cantante recientemente fallecida, quien estuvo en La Falda en el 2008 con motivo de las bodas de plata del evento.
Con Carlos Nieto en bandoneón, Pepo Ogivieki en piano, Horacio Burgos en guitarra y Andrés Novarino en bajo, comenzó a sonar el tango en la voz de Carlos Abiague, al que siguió Juan Peinado, que interpretó entre otros temas “Margot” (incluído en su último trabajo “Sin Lágrimas”) y “El último round”.
Luego la danza llenó el escenario, con la presencia de Lorena Bosio y Pablo Sanguineti.
Otro lujo de esta edición del Festival, fue la presencia de la violinista Erica Di Salvo y su Orquesta Típica. La excepcional intérprete y su agrupación hicieron vibrar al público al compás de cada una de sus magistrales interpretaciones, como “Adiós Nonino”, “Quejas de Bandoneón”, “Canaro en París” entre otras. También invitó a Esteban Riera, quien cantó “Por una cabeza”. Su virtuosa actuación fue largamente aplaudida de pie por el público presente.
La noche continuó con la presencia de Pablo Funes, de quien se escucharon temas como “Frente al mar”, “Y te parece todavía” y “Remembranza”.
La voz femenina llegó al escenario con Patricia Lallana, quien deleitó con “La última curda”, y como homenaje a Eladia Blázquez, “Sueño de barrilete” y “Fiesta y milonga”, dándose el gusto de bailar algunos pasos, junto a bailarines de La Calera.
Y en este desfile de estrellas, llegó al Carlos Gardel, el Maestro Osvaldo Piro, junto a la Orquesta Metropolitana, deleitando como siempre a la platea. En esta edición también compartió el escenario con Omar Mollo, quien con su particular estilo, interpretó temas como “Naranjo en Flor”, “Gricel”, “Cambalache”, “Nada”, entre otros. La actuación del Maestro Piro, se vio coronada con “Che, Buenos Aires”, “Libertango” y “Octubre”.
En esta noche también se sumaron las voces de siete cantantes de distintos puntos del país que aspiran a su consagración y que participan del certamen.
Y desde la casona ubicada en Balcarce e Independencia en el barrio porteño de San Telmo (fundada en 1969 por Edmundo Rivero), llegó el espectáculo “El Viejo Almacén”. Con una impecable coreografía, cuatro parejas de baile fueron mostrando la sensualidad del tango. Acompañados por el sexteto dirigido por Adolfo Gómez, y con la inconfundible voz de Hugo Marcel, se escucharon obras como “Melodía de arrabal”, “Naranjo en Flor”, “Milonga sentimental” (coreada por todos los presentes) y “Quien lo hubiera dicho”.
Fue entonces que la Sra. Virginia Luque pisaba el escenario. Interpretando “Destellos”, “La canción de Buenos Aires” y “El patio de la morocha”, la Estrella de Buenos Aires arrancó aplausos y lágrimas de los presentes. El Viejo Almacén, que por primera vez brinda su espectáculo fuera de su recinto porteño, tuvo un especial reconocimiento por parte de las autoridades del Festival quienes entregaron una escultura que lucirá en aquel emblemático lugar. A su vez, el representante del Viejo Almacén agradeció este momento histórico con una placa recordatoria.
Y para dar un cierre especial a esta noche, llegaba al Anfiteatro la reconocida cantante Sandra Mihanovich, con “El corazón en el sur” y como homenaje a Eladia Blázquez, “Sueño de barrilete”, “Somos como somos” y “Siempre se vuelve a Buenos Aires”. La velada llegaba a su fin en la recta final del Festival Nacional del Tango.
Erica Di Salvo |
Sandra Mihanovich |