Fuegos artificiales

Víctor Heredia y León Gieco

Pablo Bauhoffer, Nathalie Allende y Claudio Juárez

La novena noche, comenzaba con un clima nostalgioso. Claudio Juárez invitaba a volver el año próximo para seguir disfrutando de la magia del reencuentro en Cosquin, donde se plasma la escencia del saber provinciano.

El Ballet Camin junto con bailarines de la Escuela Municipal de Folklore, tuvieron a cargo la apertura.

Un momento muy especial se vivió cuando en el Atahualpa Yupanqui, era convocada la autora de la letra del Himno a Cosquin, la Sra.Zulema Alcayaga, que junto a su esposo, el músico Waldo Belloso, que hace 45 anos hicieron esta hermosa canción lema de este Festival.

En esta luna de festejos, llegaba el querido Victor Heredia, quien cumple 50 años de su consagración en esta mítica Plaza. Comenzaba su presentación con “Ojos de cielo”, “Dulce madera cantora”, pudiendo verse en la pantalla fotos del artista con otros colegas. Fue entonces el tiempo de compartir el escenario con familiares y amigos. Víctor canto junto a su hijo Lautaro “Razón de vivir la vida”, con su hija Daniela “Deja un poco de luz al partir”, con León Gieco “El Adiós” y “La colina de la vida”, concluyendo con “Sobreviviendo”, acompañando por sus hijos, el Duende Garnica, Motta Luna y Carolina Peleritti, siendo ovacionadas cada una de sus interpretaciones por todos los asistentes.
El humor cordobés llegó con Doña Jovita junto a Rony Vargas, que no sólo trajo una especial versión de la Oración del remanso (Cristo de las redes). Agradeció también el apoyo de otros artistas, que se pronunciaron respecto a la Ley de bosques en esta provincia. No se privó de nada, si hasta le dió una especial bendición a “Pipulo” Juárez, llevándose el caluroso aplauso de los presentes.

Con una particular presentación en la pantalla del inolvidable Miguel Ángel Gutierrez, que decía: “cuando una mujer canta, el universo se para”, se iniciaba la actuación de la pampeana Angela Irene, quien se encuentra celebrando sus 40 anos con la música. Interpretó temas como: “Cruz de quebracho”, “Huella de ida y vuelta” y “Zamba del carnaval” entre otras. Angela fue galardonada y muy aplaudida.

El Ballet Camin, presentó entonces algunas danzas tradicionales argentinas como la firmeza, el pericón y el malambo en una brillante actuación. Seguidamente en las Postales de Provincia fue el turno de San Luis, que llevó al escenario una numerosa delegación.

Y como cada año, se hicieron entrega de los premios a los destacados de esta edición. Los ganadores fueron:

Consagración: La Bruja Salguero.
Premio Camín a la Trayectoria: Rubén Patagonia.
Premio Revelacion: Conjunto instrumental Che Chelos.
Revelación en Danza: Compañía de Danza Independiente Pucará.
Premio Sede de Cosquín en Kawmata, Japón: Patricia Ratti
Premios adquisición de la Feria Nacional de Artesanías y Arte Popular Augusto Raúl Cortazar:
José Herrera (Ojo de agua, Santiago del estero). Categoría: Madera, especialidad: lutería: mandolina
Luisa Serrano (Jujuy). Categoría: metal, especialidad: filigrana, joyería colgante
Premio adquisición Fondo Nacional de las Artes
Andrea Arcas (Tandil, Buenos Aires). Rubro: fibras vegetales, especialidad: textilería telar indumentaria.
Premio Adquisición Centro Cultural Enrique Brizio
Juana Acosta (Santiago del Estero).Rubro: fibras animales. Especialidad: textilería telar criolla.

Luego de la entrega hicieron su presentación Los Nocheros, quienes también festejaron sus 30 años de existencia, con un repaso de sus clásicos temas y trayendo nuevos. Los cantantes compartieron el escenario con Axel, quien los acompañó con el tema “Gracias, lo siento, te amo”. Un momento en el que el conjunto salteño demostró que sigue vigente en el corazón de sus seguidores.

El la música de la mesopotamia entonces se adueñó del Atahualpa Yupanqui en las voces de Joselo Schuap y Lucas Segovia. Los misioneros trasladaron el litoral a la mediterránea provincia entre chamamés, chamarritas y polcas.

Para concluir esta luna y esta edición del festival, Peteco Carabajal acercó una catarata de chacareras para hacer de la plaza un gran patio santiagueño.

Así concluía un año más del Festival que los amantes del folklore llevan dentro del corazón. Un año más en el que los duendes coscoínos invadieron la plaza, la ciudad y el Valle de Punilla todo. Duendes que se despertarán en el 2018 cuando se renueve el grito “Aquí Cosquín!!!.... Capital del Folklore!!!!”

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