Y llegó enero a Cosquín. Con una noche estrellada, siendo las 23 hs y el escenario engalanado con una Bandera Argentina, se escuchó en la voz de Susana Moncayo, la canción Aurora, que fue coreada por el público presente, de pie. Al terminar, un numeroso grupo de gauchos recogió la enseña patria, retirada con un fervoroso aplauso.

Luego en la plaza se oyeron los sones de nuestro Himno Nacional Argentino, el cual fue interpretado en lenguaje de señas por los Ballets Camin y de la Costa.
El Vicario Parroquial, Reverendo Padre Marcos E. Cabrera, tras una breve reflexión, dió la bendición a esta 49 edición del festival.
Se escucharon entonces los versos del poema de Armando Tejada Gómez “Un grito de ida y vuelta” y los acordes del Himno a Cosquín, que con renovada coreografía interpretaron los ballets antes mencionados, quienes culminaron su actuación coreando: ¡Argentina, Argentina!...
Y con sentida emoción, Fabián Palacios dio el esperado grito de ¡Aquí Cosquín!... para luego invitar al maestro de ceremonias Miguel Angel Rodríguez, que fue recordando a figuras señeras de nuestro folclore en distintos períodos. A ello se sumó el infaltable tañido de las campanas de la Iglesia y el estruendo de los fuegos artificiales.
Y el ritmo del litoral inundó el escenario, con Los Alonsitos, quienes invitaron a los presentes a comenzar con la fiesta. Se escucharon entonces "El Toro", "Serenata", "Otro cariño", "Un chamamé y un carnaval" entre otros. El conjunto chamamecero animó a los presentes, quienes corearon canciones, bailaron y se encendieron con los sapucays.
Maia Sasovsky, tuvo a cargo la presentación del Duo Moire, ganadores del Pre Cosquín 2008, oriundos de Casilda, Pcia de Santa Fe, quienes finalizaron su actuación con "Chamamé de los Esteros".
Un momento muy especial se vivió, cuando Miguel A. Rodríguez, hizo un reconocimiento a Marcelo Simón, quien por décadas fue el encargado de escribir los versos que se leían en el escenario Atahualpa Yupanqui. Fue el mismo Marcelo quien tuvo a cargo la presentación de la Delegación Oficial de la Provincia de La Rioja, los cuales acompañados con la imagen de San Francisco Solano, presentaron diversos ritmos, terminando con una representación del carnaval chayero, expresando con mucha gracia en uno de sus temas " Córdoba es linda, Salta es mejor, pero mi Rioja es un ramo de flor..."
A ellos siguieron Micaela Rivero, Cristian Guzmán (ganador del Pre Cosquín 2008) de la Pcia. de Santa Fe y desde La Rioja, el Tubo Moya.
Hizo entonces su presentación en el escenario el legendario Carlos Di Fulvio, quien siempre sorprende con su actuación. En esta edición y como es su costumbre, interpretó un nuevo tema: "Chacarera de las Juntas", para seguir luego con "La Telera Tulumbana", "Coplitas para mi muerte", y un sentido homenaje al Cura Brochero. El artista, fue escuchado con gran respeto por todos los presentes, los cuales lo aplaudieron de pie, por lo que volvió para deleitar con " Campo Afuera", terminando así su actuación.
Y en este encuentro americano, también hubo un espacio para"Illapu", grupo chileno que interpretaron entre otros temas "Negro José" y junto al Dúo Coplanacu "Zamba de Lozano", El público cantó y bailó con cada canción que entonaron los transandinos.
A Illap, siguió el talentoso armoniquista santiagueño Paco Garrido, el que presentó un amplio repertorio.
Desde Villa María llegaron Los Soñadores; a los que siguieron Cantoral y desde Jujuy Bruno Arias, quien interpretó entre otras "Changuito voz de Urpila" concluyendo su actuación junto al Ballet Juventud Prolongada, ganador del Pre-Cosquín 2009, mostrando en Cosquín el carnaval de la puna.
Por último, el predio de la Próspero Molina se convirtió en un patio santiagueño con la presencia de Los Carabajal, quienes cumplen cuarenta años con la música. Con todo su carisma, en una impecable presentación cantaron "La Telesita", un homenaje al escenario Atahualpa Yupanqui con su versión de "El Antigal". El repertorio incluyó, de Jacinto Piedra "Los niños del mundo", "Salavina" y otros éxitos, los cuales fueron coreados y bailados por los presentes. Ya era la madrugada y Santiago del Estero seguia escuchandose en Cosquín. Culminaba así la primera noche en el Valle de Punilla.